De esto que te pones a pensar en recetas para poder poner en el blog y te haces con unos cuantos limones de eso que quitan el hipo (por cierto, del campo de mi prima). Y me junto con los limones, unas cuantas almejas, un tomate, y unos ajos. Y así como si fuese un dibujo animado, se me encendió la bombilla y pienso... ¡¡Se les va a hacer el culo fanta!!
Y aquí estamos, con un recetón de pasta que no se tarda na' en hacer y encima sale muy barato. Sí señores, las almejas no son caras. A ver si nos pasamos más por la pescadería y vemos un poquito los precios. Vamos, digo las almejas normalitas, no os liéis. Atentos todos que mañana hago examen sorpresa:
DIFICULTAD:
No confundir los limones con los ajos. Pensad que los dos son amarillos, menos los ajos.
INGREDIENTES:
- La pasta que prefieras. Yo usé unas cintas de esas que vienen enrolladas, pero usa las que tengas.
- Un limón
- Una nuez de mantequilla.(se dice así, pero es una cucharadita. No nos perdamos aún que es pronto pa' perderse)
- Un puñadito de almejas. Debes tenerlas en un bol con agua y sal desde la noche de antes para que pierdan la tierrilla que puedan tener.
- Un chorrete de vino blanco. Si no tienes, que sé que los estudiantes no suelen tener, no pasa nada. Usaremos un chorrete de agua con un poco de vinagre.
- Un ajo hermoso.
- Medio tomate. Realmente lo usé un poco para acabar el plato, pero podríamos obviarlo. Aunque he de deciros que le da su puntillo.
- Romero. Si lo tienes fresco (por alguna casualidad) mejor que mejor.
- Un chorrito de aceite de oliva, pimienta y sal.
PREPARACIÓN:
- Lo primero, como siempre, es poner agua a hervir en una olla con tapa para cocer la pasta. Sigue las instrucciones del paquete en cuanto a tiempo. No le pongas la sal hasta que no empiece a hervir. Y no le pongas aceite (por favor). Y, por supuesto, NO ENFRÍES LA PASTA. Esto es muy fácil y lo sabéis hacer todos. Así que no me enrollo mucho.
- Mientras hacemos esto, vamos a poner en una sartén un poco de mantequilla y el ajo laminado para que se vaya dorando.
- Añade las almejas sin abrir a la sartén y pon un chorrete de vino blando (o el agua con el vinagre si no tienes) y un na' de agua. Debe mojarse el fondo para hacer vapor, pero no debe cubrir ni la cuarta parte de la almeja. No os paséis o vais a beber caldito con los espaguetis. Y tápalo con la tapa. -Valga la redundancia-
- Déjalo 3-4 minutos hasta que se abran las almejas y añade un buen chorretón de limón junto con un poco de la ralladura del mismo. No te pases rallando y llegues a "lo blanco", que amarga.
- Mete la pasta cocida dentro (sin haberla enfriado) y mézclalo bien con cuidado para no romper las cáscaras de las almejas.
- Emplata, ponle el tomate cortado en cudraditos pequeños, añade romero por encima, un chorrete más de limón y un chorrito de aceite de oliva en crudo. ¡¡Listo!!
Ya ves que está chupao' de hacer, no tardas nada, no manchas mucho y encima es barato. ¿Qué más se puede pedir? Pues que esté bueno, y eso por supuesto que lo cumple. Cuando lo probéis se os va a hacer el culo fanta como se me hizo a mí.
Puedes cambiar las almejas por mejillones, o berberechos, o unas chirlas... Eso ya como tú prefieras. También puedes añadirle un poco de picante, con una pequeña guindilla o una cayena. En fin, veis, que con la pasta siempre se pueden hacer miles de cosas. Id contándome las variantes que os gustan y así las voy probando.
Y a cocinar, filibusteros, que el mundo se va a acabar.
He probado hoy esta receta, y como no tenía vino blanco le he puesto mirin (para quien no lo sepa: vino de arroz dulce, especial para cocinar y que tiene una graduación muy baja). Y el plato ha quedado con un toque dulce que estaba de rechupete.
ResponderEliminarPor cierto, que envidia me dan tus compañeros de piso... pero que envidia más cochina...
La idea es fantástica. Muy bien solucionado, sí señor.
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