Caramelos de Metanfetamina Azul



     Si te suena un poco raro lo de la metanfetamina azul, es que no has visto Breaking Bad. Lo primero que tienes que hacer es acabar de leer el post, y lo segundo, ponerte manos a la obra con la serie.

     Esta receta me la encontré hace poco por Internet, y como no podía ser de otra manera, me flipó. Es supersencilla de hacer y sale por muy poco dinero. Les dí un sabor a limón, pero puedes ponerle el que quieras. 

     Es una receta de la que estaría orgullo el mismísimo Walter White, aunque no se parezca nada a la química y lo hagamos un poco a ojo. Let's cook:

DIFICULTAD:

Es más fácil que entender el capítulo de la mosca (3x10 BreakingBad)

INGREDIENTES:

  • Medio kilo de azúcar. No os preocupéis, no hay que comérsela toda de golpe. 
  • Un cuarto de vaso de agua. Hay que ir probando poco a poco. Si nos pasamos, nos quedará muy líquida y no "cuajará"
  • Dos frasquitos de esencia de limón. Te los venden en todos los super, no te agobies.
  • Unas gotas de colorante azul. Te aconsejo que lo uses en gotas, pero si lo tienes en pasta, no pasa nada
  • Papel de horno
  • Bolsas de congelación pequeñas

PREPARACIÓN:
  1. Vamos a poner una olla al fuego y le vamos a añadir el azúcar y el agua. El resultado tiene que ser una pasta, no te pases con el agua o harás un caramelo líquido y no es lo que queremos.
  2. A medida que se va calentando, el azúcar se va fundiendo y se va formando el caramelo. NO METAS EL DEDO BAJO NINGÚN CONCEPTO. El caramelo es de las cosas que más calor guarda. Avisado quedas, luego no llores.
  3. Una vez empiece a burbujear y veas que toma un color marroncito por la superficie es que ya estará. Te aconsejo que no te quedes corto con el tiempo o el caramelo te quedará con granitos de azúcar.
  4. Añade la esencia de limón y el colorante. Ve añadiendo gota o gota hasta que tome el color que quieras.
  5. Ahora tienes que poner en una bandeja (la de horno preferiblemente) un papel de horno o papel cebolla. Y añade el caramelo por encima para que se extienda. Déjalo que se enfríe durante toda la noche.
  6. Ahora vas a sacar tu vena más psicótica y te vas a liar a martillazos con el caramelo. Se habrá quedado como un ladrillo y hay que hacerlos de un tamaño "normal". Dale duro con el martillo o con el mango de un cuchillo de cocina, o con el rodillo, o con la cabeza de un primo... Será por posibilidades
  7. Ahora los metes en bolsitas individuales y listo.



     Reparte entre tus amigos o entre los yonkis de tu facultad, tu sabrás. Puede ponerle el sabor que quieras, limón, fresa, vainilla, coco, tropicaol o cualquiera de los innumerables sabores que hay.

     Y a cocinar, bitches, que el mundo se va acabar. El que no haya visto la serie, que se quede con el filibusteros de siempre.

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